Ayer nos reunimos.
Pasaron atestados veinticinco años,y parece que fue un momento.
Las canas, las ganas,
las arrugas, las pizarras,
los relojes de sus muñecas,
los relojes de sus muñecas,
y las miradas cansadas.
El fuerte viento nos devolvió sonrisas,
y los recuerdos atrapados entre palabras y cuentos
ya no fueron tan alusivos a la época,
El fuerte viento nos devolvió sonrisas,
y los recuerdos atrapados entre palabras y cuentos
ya no fueron tan alusivos a la época,
sino delicias en la mesa.
En unas horas,
estuvimos anclados al puerto de las aulas,
aquellas que fueron cruzadas tímidas al mar del anhelo.
Y luego de verlos a todos
no me quedó tanta reminiscencia,
pues logré pintar algunos recovecos al óleo de su amistad.
Cada hora y cada materia,
cada cuaderno y cada pupitre.
Y cada una de sus caras sonrientes
se me quedaron sembradas en firme.
Ayer a esta hora se nos iba el tiempo.
Y se nos fueron también los recuerdos...
esos que hoy se quedaron en vivencias.
esos que hoy se quedaron en vivencias.
2 comentarios:
-- Dedicado a los amigos y compañeros del Cole --
Estos garabatos fueron seleccionados para formar parte de la antología "La Vida Es Verso" del Centro de Estudios Poéticos Madrid, España.
Gracias por el apoyo, un abrazo.
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